sábado, 30 de mayo de 2009

Mi aventura dentro de 2 meses

Hace más de un mes que se que me voy de Erasmus a Copenhague (Dinamarca). Pero aun no se bien porque no me había decidido a hacer una actualización al respecto. Supongo que estaba esperando a que se me pasase la euforia...

El 18 de agosto comenzará mi aventura. Ese día parte mi vuelo con dirección a una de las ciudades más bonitas de Europa y también más frías. Allí me esperan 6 meses de incertidumbre y sorpresas. No se qué haré cuando llegue, ni cómo iré a la universidad, ni si mi inglés será suficiente para poder comprender una clase de comunicación. Pero, a pesar de que mis primeras semanas sean caóticas, estoy segura que me acabaré acostumbrando a una nueva vida.



Los que me conocen saben que tenía muchísimas ganas de una oportunidad como esta. Y aunque por momentos me aterra irme sola y dejar todo lo que dejo aquí, tengo ganas de empezar a tejer mi propia aventura. Me apasiona la idea de hacer una maleta no para una semana de vacaciones sino para medio año. Me encanta pensar que dejaré de ser turista para convertirme en ciudadana. Durante esos seis meses estoy convencida de que voy a aprender mucho sobre mi misma y también mucho sobre los demás, la vida en general, la cultura de los otros...

Sólo espero empaparme de todo y volver aquí habiendo crecido como persona.

Con el Erasmus se me abre también la oportunidad de participar en el proyecto que, hace ya unos meses, comentaba en este blog. A partir del 18 de agosto y hasta que dure mi andadura por tierras danesas, colaboraré en tuaventura.org, una página dedicada al periodismo de viajes dirigida por Santiago Tejedor.

El viaje me fascina, pero aun me fascina más poder contárselo lo al resto del mundo desde mi perspectiva, sin filtros...

Viajo para conocerme a mi misma...

lunes, 25 de mayo de 2009

Mentiras


El post anterior me ha hecho reflexionar sobre la esencia del periodismo, sobre el trabajo de periodista y sobre los periodistas mismos. He meditado acerca de la frase de R. Kapuscinski que dice que para ser periodista h
ay que ser buena persona. Y así, encadenando ideas y conceptos sobre pilares del periodismo, ética, profesionalidad, actitudes...he recordado algo que nos explicó el pasado jueves Ferran Sales en clase de Producción Periodística.

F. Sales nos mostró dos artículos publicados hace unos años en La Vanguardia i en El País. Ambos contenían mentiras. El primero era una ficción. Su autor había inventado todos y cada uno de los datos que aportaba, de los testimonios que entrevistó. El supuesto periodista jamás había pisado el escenario de los hechos, jamás los había presenciado. Por su parte, el segundo artículo, incluía al final de la redacción una declaración que nunca se hab
ía producido. Se trataba de una declaración que bien podría ser la voz del periodista, la manera de filtrar su opinión sobre, en este caso, una guerra.


Es evidente que ambos casos utilizan la mentira, tergiversan la realidad pero, ni mucho menos, lo hacen de la misma manera. Uno inventa, crea. Se convierte en artista. El otro contrasta, busca fuentes pero introduce una frase que no ha existido, no al menos en boca del médico a quien se la atribuye. Después de esto yo me pregunto: ¿Tienen las dos mentiras igual valor? ¿Se deben condenar estas acciones? ¿Hasta que punto un periodista puede modificar la realidad para hacer oír su voz? ¿Pueden, deben permitir los medios algo así?

Lo cierto es que no se pueden comparar las dos mentiras. La primera deslegitima la tarea del periodista y empobrece al periodismo. La segunda en cambio, aunque mentira también, sólo pretende hacer llegar a la opinión pública la opinión del profesional que la escribe. No estoy justificando este último uso pero, quizás si no fuésemos meros títeres del sistema de comunicación imperante en el que el papel del periodista está sumamente condicionado por unas normas que pueden llegar a asfixiar, F. Sales (el periodista en cuestión) no se hubiese visto obligado a escribir "sucia guerra" entre comillas. Quizás, simplemente, podría haber concluido la noticia con la misma pero, esta vez, sin comillas.

domingo, 24 de mayo de 2009

"Para ejercer el periodismo ante todo hay que ser buena persona"

Hoy toca escribir sobre ensayos, ensayistas y lo que te han aportado. Y lo cierto es que yo de ensayos y ensayistas ando bastante perdida, para que vamos a negarlo! En estos tres años de carrera, he leído algunos ensayos. Pero, seamos sinceros, no me han aportado nada. Si no, ¿cómo se entiende que no me acuerde de ninguno de sus títulos o autores?

Por mi desconocimiento en el campo del saber, desde que Perceval propuso el tema en clase el pasado lunes, he estado pensando qué podía hacer con esta actualización. En este proceso me han servido de gran ayuda mis compañeros, que con sus ejemplos y comentarios, me han recordado la magnifica obra de Ryszard Kapuscinski titulada Los cínicos no sirven para este oficio. La verdad es que ignoraba que este libro fuera un ensayo, así que agradezco que me lo recordaran.




El título que encabeza esta actualización es una de las frases que más me impactó de su ensayo y también un buen resumen sobre el argumento principal de la obra: el buen periodismo. Para el periodista polaco, ser buena persona es el condimento indispensable para que la salsa quede perfecta. Es necesario comprender, ponerse en el lugar del otro, vivir la noticia desde dentro, conocer los intereses, las tragedias y las vidas de las personas afectadas. En una palabra, ser buen periodista requiere implicación.

A todos aquellos que vamos camino de ser periodistas dentro de poco ya (¡sólo nos queda un año, ánimo!) recomiendo, si no lo han hecho ya, que lean este ensayo. Pero aún más recomiendo a todos los periodistas con
sagrados que lean o relean esta obra; quizás así recuerden porque un día quisieron dedicarse a este oficio y dejen de manipular la realidad. Quizás así, puedan volver al origen del periodismo, tan criticado en los últimos tiempos.

Ryszard Kapuscinki, maestro de periodistas como muchos le llamaban, murió el pasado enero del 2007. En su dilatada carrera presenció 27 revoluciones, vivió 12 frentes de guerra y fue condenado cuatro veces a ser fusilado.

jueves, 21 de mayo de 2009

El lector


Hace aproximadamente un mes acabé de leerme uno de los libros que me regalaron para Sant Jordi: The reader (el lector). Desde entonces, había querido ponerme a escribir aunque fueran cuatro líneas sobre la novela. Esto no pretende ser una crítica literaria, porque me faltan conocimientos para ello; simplemente es la reunión por escrito de un conjunto de sensaciones e impresiones.

Cuando vi el trailer anunciado por televisión debo admitir que me fascino. Me llamó la atención también que Kate Winslet ganara el Oscar a la mejor actriz por su interpretación en esta película. Fue entonces cuando me dije que tenía que leer el libro. Sí, el libro! no se porque tengo la extraña manía de leer antes de ver. Aunque no siempre, las adaptaciones cinematográficas de novelas suelen dejarme bastante decepcionada. Por eso, cuando tuve la oportunidad empecé un paseo por las páginas del Holocausto.

Lo primero que quiero destacar es la manera en que Bernhard Schlink, autor de la obra, trata el tema del Holocausto nazi. Estamos acostumbrados a libros historicistas, bélicas en esencia. Pero aquí la perspectiva es diferente; se cuanta la historia desde el ahora con un personaje implicado en el pasado y otro que sólo conoce de él por los libros de texto del colegio. Creo sin duda que esta estructura narrativa enriquece el resultado final.

Después, la caracterización de los personajes. No voy a explicar el argumento porque es posible que ya lo conozcan. Sólo apuntar dos detalles: la vergüenza extrema de Hanna porque la gente conozca su analfabetismo que la lleva, incluso, hasta la cárcel. Y, el proceso de maduración de Michael. Y además de esto, la evolución del amor que se produce entre ellos. Primero pasional y secreto, después lejano, luego sólo afecto y cariño. Enamorados del pasado.

El libro me ha fascinado. La historia resulta veraz, está bien contada. Me gusta el estilo de escritura, los capítulos cortos que te invitan a leer uno más porque sólo son 4 páginas aunque te tengas que ir a dormir, el lenguaje que utiliza. Me gusta el final.


Supongo que ahora me toca ver la película...



viernes, 15 de mayo de 2009

Reflexión (II)

Sigo con el tema de la anterior actualización pero esta vez no busco una palabra que defina mi blog sino un aforismo, un adagio, una paremia o un wellerismo. En mi caso, he elegido una frase de Rudy Spillman que dice así:

"No existe la posibilidad de averiguar sobre sí mismo y no sorprenderse"

Aunque a algunos les pueda parecer mentira, este blog me ha dado la oportunidad de conocer muchas cosas sobre mí, sobre lo ignorante que soy respecto a muchas cosas, sobre lo que se sobre otras y sobre lo que me gustaría saber. Y siempre, con cada tema que nos ha propuesto Perceval, he intentado buscar el lado más desconocido para mí para así explotarlo al máximo. Y entonces sorprenderme y maravillarme de las muchas cosas que antes dejaba atrás y que ahora, poco a poco, voy incorporando.

Todavía me queda mucho por aprender, por vivir, por reflexionar...todavía me queda mucho de lo que sorprenderme!

Reflexión

A veces cuando nos preguntan que nos definamos con un par o tres de adjetivos o que hagamos lo propio con la persona que tenemos a nuestro lado nos resulta difícil. Y normalmente solemos contestar, sin pensar, que tres adjetivos son muy pocos. Pero, en realidad, el problema no es que tengamos una decena o más de adjetivos entre los que escoger. Lo que realmente ocurre es que no somos capaces de saber que es lo que nos define. Si nos preguntaran sólo por un adjetivo, tampoco sabríamos que decir.

Eso es lo que me pasa a mí muchas veces. !Con cuantos tests me he encontrado que me preguntaban sobre esto! Supongo que nos resulta tan complicado responder porque pocas veces reflexionamos sobre nosotros mismos, sobre lo que somos o lo que queremos ser. Es bastante más sencillo mirar al de al lado e intentar adivinar quien es, prejuzgarlo o conocerlo desde la superficialidad.



Con los temas de este blog me ha pasado exactamente lo mismo. Los que me siguen, ya se deben haber percatado de que no soy experta en nada de lo que he tenido que escribir. Lo que he hecho es intentar reflexionar sobre aspectos, sobre realidad que se escapaban de mis aficiones, mis conocimientos. Y aunque ahora no soy una experta en cine, tebeos o cultura en general, sí que puedo decir que reflexionando he llegado a conocer lo desconocido hasta ahora.

Por todo esto, la palabra que define este blog es reflexión. Una reflexión personal, que puede parecer bien o no, que puede ser acertada o puede tener fallos pero que, al fin y al cabo, es propia.

lunes, 11 de mayo de 2009

Ponle precio!

La Rambla de Mataró son siempre un lugar con bastante afluencia de gente. Más, incluso, si se trata del fin de semana. Así que este sábado no iba a ser menos...Pero, lo cierto es que cuando entramos a la calle principal la vi un poco más concurrida que de costumbre. Pronto encontramos la razón de tanto barullo.

Toda La Rambla, desde el inicio hasta el final, estaba llena de mesas con cuadros y pinturas que hacían las veces de exposición. Era una galería de arte en pleno centro de la capital del Maresme y al aire libre. Después de recorrer un par de mesas nos percatamos de que se trataba de la 14a feria de dibujos y pinturas (ver artículo).


Tengo que admitir que me encantó pasear entre cuadros, muchos de ellos abstractos. La pintura es un arte que me fascina pero del que realmente desconozco poco. Cuando me pongo delante de una obra sólo puedo opinar y decir si me gusta o si no, pero no tengo criterios profesionales para valorarlas. Quizás, por eso, a veces encuentre excesivo el precio que piden por ellas.

En una de las mesas se me ocurrió preguntar cuanto costaba una obra pequeña, casi diminuta pintada con acuarelas. La respuesta del artista fue "cuanto crees que cuesta?". A lo que respondí "40€". Poco después me dijo que su precio era de 30€. Ya casi al final del paseo, descubrí un lienzo precioso de Nueva York que me quedó boqueabierta. Su precio también lo hizo. 260€.

Con todo, lo única que pretendía con esta actualización era reflexionar públicamente sobre el precio del arte. ¿Como se le pone precio a una obra? ¿Es muy caro 260€ para un cuadro de 50cm x 60cm? Después de dos días dándole vueltas al tema sigo desconociendo la respuesta...

jueves, 7 de mayo de 2009

Sawyer y yo. Freddie Mercury y Sawyer (II)

Tercera parte del experimento del pasado lunes en clase de cultura: reúnete con otro compañero y recrea una situación en la que se encuentren los dos personajes. En clase había protagonistas tan diversos como Peter Pan (ver blog), Adolfo Bécquer (ver blog) o Satine (ver blog). Así que cualquier combinación con Sawyer habría sido curiosa. Este fue el resultado.

Sawyer (Perdidos) y Freddie Mercury (ver blog): Encuentro en la isla

La explosión del bunque había causado miles de destrozos y heridos. Incluso algunos habían desaparecido. Sawyer despertó en medio de la selva, aturdido y con una profunda herida en el brazo izquierdo. Cuando recobró las fuerzas, arranco un trozo de su camisa, que haría las funciones de vendas hasta que pudiera dar con el Jack.

Se levanto poco a poco y camino sin dirección varios metros hasta que algo le sorprendió. No sabia si se trataba de una alucinación, de algo meramente producido por la contusión del golpe, por la pérdida de sangre pero, lo cierto, es que delante de él estaba viendo al que fue uno de sus ídolos: Freddy Mercury.



Aquello no podía estar pasando. Pero Sawyer sabia que la isla guardaba secretos inexplicables así que camino con paso decidido y lo sorprendió por la espalda. Ya no se fiaba de nada ni de nadie. Él podía ser uno de los otros. Así que lo amarró a un árbol y le lanzó sin descanso un sinfín de preguntas para contratar que, en realidad, era quien parecía ser.

- Cuál es tu nombre verdadero?
- Farrokh Bommi Bulsara
- En que grupo británico participabas? Cuáles eran las funciones que desarrollabas?
- Queen. En la banda ejercía de solista, compositor, pianista y guitarra ocasional en los conciertos.
- Cuál fue la causa de tu muerte?
- Me detectaron SIDA en el 1991, tuve una broconeumonia multilobal que no pude soportar a causa del SIDA y morí.
- Quien estaba contigo en ese momento?
- Venga...en serio necesitas todas estas preguntas? No te vale con verme y darte cuenta de que soy yo?
- Quien?!
- Bufff...mi pareja y Elton John.

Después de unas horas, Sawyer se dio por vencido. Lo desató del árbol y se quedó allí, inmóvil, con la vista clavada en Freddy Mercury. Le encantaba ese hombre, sufrió con su muerte pero aun así detestaba que fuera bisexual. ¡Claro! No podía ser que una persona como Sawyer aceptara algo así. Sin embargo, por estos tiempos, James ya empezaba a dar signos de que no era tan mala persona como él mismo y los demás creían.

Así que se disculpó con la estrella del Rock y caminaron juntos en busca de la playa. Allí se encontraron con otros supervivientes. Después de las presentaciones y explicaciones oportunas, Freddie se animó con la guitarra de Charlie y tocó para los que todavía quedaban vivos del vuelo 815 de Oceanic.

martes, 5 de mayo de 2009

Sawyer y yo. Yo y Sawyer (I)

En estos tres años de carrera he tenido clases un tanto surrealistas, pero ninguna como la del pasado lunes de cultura. Primero elige un personaje, un protagonista de ficción, literario, etc. y después contesta a unas cuantas preguntas sobre él. Y luego ya, para rematar la hora y media de clase, júntate con otro compañero y realiza una ficción con los personajes de cada uno (pueden salir cosas tan estrambóticas como sucedió en mi caso). El resultado, sin duda, ha sido divertido. Aquí lo tenéis.

James Sawyer, Perdidos (Lost).

- En que te sientes identificado con el personaje?
- Sawyer tiene dos caras. Una es la que vemos a simple vista que muestra un hombre muy duro, muy fuerte, egoísta y cruel. Pero detrás de este caparazón se esconde un hombre muy sensible, amante de la lectura. Yo creo que tengo estas dos caras, aunque por suerte prima la de chica sensible desde hace ya un tiempo.
Al final de esta actualización teneis un video que muestra a la perfección estas dos caras :)

- Valores negativos del protagonista.
- Es muy borde, tiene mucha maldad, es agresivo, frió y calculador. No sabe perdonar ni olvidar, es muy rencoroso. Es muy egoísta.

- Valores positivos
- Es un hombre sensible, aunque se empeñe en esconderlo y negarlo. Le encanta la lectura, es irónico, es un superviviente y un luchador nato. Es decidido y valiente.

- Si hicieras un documental, novela, etc. sobre este personaje en que te centrarías?
- Creo que lo más interesante es ver como Sawyer esconde dos personalidades en una misma persona. Las circunstancias específicas de su infancia lo convirtieron en un hombre sin escrúpulos pero en esencia su persona dista mucho de tener los valores propios de una persona así. Para poder analizar esta "doble personalidad" es vital seguir la evolución que se produce a lo largo de las distintas temporadas de Perdidos.

- Si pudieras adoptar un papel dentro de la ficción, cuál sería?
- Sería Sawyer. El Sawyer de la primera y la segunda temporada me recuerda a mi cuando tenia 14 años y hasta los 17, más o menos. El Sawyer de los siguientes capítulos es mas parecido a mi yo actual.

-En que ha contribuido a la humanidad?
- Individualmente nada pero si en colectivo. Como personaje de la serie ha contribuido a crear un producto televisivo sin precedentes en la historia de las teleseries americanas. Perdidos ha creado un club de millones de seguidores en todo el mundo. Incluso, el fenómeno es tal que las cadenas de todo el mundo se han puesto de acuerdo para emitir el final de la serie de manera simultanea (ver artículo).

- Cree que merece algún tipo de reconocimiento?
- En este caso, obviamente el reconocimiento no recae sobre el personaje sino sobre la persona que lo interpreta, Josh Holloway. Josh ya ha sido reconocido por su trabajo por la crítica especializada así que, creo que lo que se merece, es que le sigan reconociendo su trabajo, que es realmente brillante.



sábado, 2 de mayo de 2009

Un superhéroe un tanto especial

En la historia del cine, de los tebeos y de los dibujos animados podemos encontrar multitud de personajes con poderes especiales. Estos poderes son los que los diferencian de la raza humana y le otorgan la categoría de superhéroe.

Pero, es un superhéroe bueno o malo? La historia nos dice que existe de todo, una amplia gama de personajes que se adaptan a todos los públicos. Hay superhéroes buenos, que persiguen las injusticias y que luchan por un mundo mejor. Algunos de los personajes más conocidos en este sentido son Spiderman, Batman o los 4 fantásticos. Pero, al mismo tiempo, hay superhéroes villanos cuyo único anhelo es destruir y hacerse con todo el poder del mundo y, para ello, no dudan en utilizar la fuerza de forma desmesurada. Darth Vader, Lord Voldemort, doctor Eggman o Doctor Jekyll son sólo algunos de los que forman este colectivo.



Y entre uno y otro se encuentra Hancock, el superhéroe interpretado por Will Smith. Lo cierto es que el personaje de Hancock evoluciona desde una figura cercana al villano a un superhéroe admirable. Hancock parte de una irresponsabilidad infinita por todo lo que le rodea. Sus acciones pretenden ayudar pero nada mas lejos de la realidad: lo único que consigue aplicando sus poderes es conseguir una situación más dramática todavía. No controla su fuerza, su agresividad. Alcohólico, maleducado, egoísta y andrajoso, el superhéroe es más un estorbo que un bien para la sociedad.

Sin embargo, Hancock cambia gracias a la ayuda de Ray Embrey (Jason Bateman), un relaciones públicas que hará de Hancock el superhéroe que desde un inicio debía de haber sido. Es entonces cuando empieza a cuidar su imagen, a administrar su fuerza, a solucionar conflictos y a aplicar sus poderes con un poco de sentido común. Hancock es superfuerte, ultrarrápido, superresistente y capaz de volar, inmortal y extremadamente longevo, pues pertenece a una saga de inmortales. Ahora sí Hancock se parece más a un superhéroe y deja de ser el hombre solitario y mezquino que una vez fue.

Sin duda, Hancock es uno de los superhéroes más atípicos que ha pasado por la gran pantalla, al menos desde mi punto de vista. Se trata de un superhéroe que no cree que poseer superpoderes entrañe un grado mayor de responsabilidad. Un superhéroe que cambia su manera de ser y su vida por completo. Un superhéroe que puede perder todos sus poderes si está cerca de la mujer a la que ama, la única superhéroe que pertenece a la misma saga de inmortales que Hancock, Mary EMbrey (Charlize Theron).